Intervención del Presidente de AVE en el Pleno con el Excmo. Presidente del Gobierno de Aragón

¡Excmo. Presidente de Aragón, Sr. Marcelino Iglesias!¡Excmos. Consejeros del Gobierno de Aragón!¡Sr. Delegado del Gobierno, Amigo Ricardo!¡Sr. Consejero Delegado de PLAZA!¡Sr. Secretario General del PSPV-PSOE, amigo Jorge!¡Amigos de AVE!AVE, integrada por 90 empresarios líderes de las tres provincias de la Comunidad Valenciana, tiene como misión el contribuir al desarrollo social y económico de nuestra Región.Y lo hace, en su condición de animador social, con vocación de trabajar en colaboración con otros actores, tanto valencianos como de las regiones limítrofes y el Estado, para construir un espacio fuerte y competitivo en el sur de Europa.En los últimos tiempos la Comunidad de Aragón y la Comunidad Valenciana han tenido diferencias que nos han distanciado y en las que los componentes emocionales han sido tanto o más importantes que los racionales.El agua es un bien fundamental para cualquier pueblo, y en ningún momento ha sido la pretensión de los valencianos el disputar el agua que necesitan los aragoneses para desarrollarse.Sólo hemos pretendido los excedentes existentes una vez garantizado el caudal ecológico a fin de tratar de solucionar el grave y estructural déficit hídrico que padece nuestra Región, y en especial la Provincia de Alicante, tal y como se desprende del estudio que le hicimos llegar el pasado mes de junio.Necesitamos, Sr. Presidente, llegar a un acuerdo nacional, buscando el interés general, sin posturas preconcebidas y en el que todas las partes implicadas actúen con una mayor flexibilidad de la que hasta ahora han hecho gala dejando de lado ideologías y posturas inamovibles, aportando soluciones aceptables para todos.Pero a pesar de estas diferencias temporales, lo que nos une a las dos comunidades es mucho más importante que lo que nos separa.Aragón y la Comunidad Valenciana tienen una historia común que se retrotrae al siglo XIII. Hemos compartido una historia política dentro de la Corona de Aragón y, ante todo, tenemos raíces sociales y vivenciales muy intensas. Muchos de nuestros antepasados son de origen aragonés, y existe una fuerte interconexión social y económica entre nuestras dos comunidades, especialmente el sur de Aragón con Valencia y Castellón.Pero lo más importante es que la construcción del futuro exige que trabajemos juntos y en sintonía.En la economía global y del conocimiento que nos toca vivir, y especialmente por lo que se refiere a la situación de crisis que atravesamos, las regiones no pueden construir una estrategia de desarrollo exitosa sin colaborar intensamente con sus vecinas.Europa y España son importantes como elementos de articulación estratégica, pero los espacios económicos supraregionales integrados, son cada vez más decisivos para construir un futuro de desarrollo y bienestar para los ciudadanos de las regiones que los componen.Por proximidad, interconexión y complementariedad, las regiones limítrofes de Cataluña, Aragón y Comunidad Valenciana debemos trabajar juntas para construir un espacio económico robusto y competitivo a nivel internacional.El cambio de modelo de desarrollo que la crisis actual hace necesario, sólo será posible desde un espacio supraregional en que las complementariedades y sinergias de distintas regiones se pongan en valor.Para nosotros, y venimos defendiéndolo desde hace tiempo, el futuro pasa por aprovechar y desarrollar el gran potencial de desarrollo del triángulo metropolitano que conforman Madrid, Cataluña y la Comunidad Valenciana y del que Aragón forma parte inseparable. Un espacio que se presenta como el armazón del principal eje de desarrollo del sur de Europa.Compartimos, Presidente, oportunidades y problemas, así como déficits, que debemos afrontar unidos, no separados, como son los siguientes:1)    La finalización de la autovía Sagunto-Somport, un importante eje de comunicaciones entre Europa y el Mediterráneo.2)    La modernización ferroviaria del eje Zaragoza-Teruel-Valencia. La situación actual es de un cordón de ferrocarril con un 24% de pendiente que hace inviable económicamente hoy su explotación no sólo como transporte pasajeros sino también como mercancías, por lo que es necesario un gran esfuerzo en inversión en infraestructuras, para hacer económicamente rentable esa comunicación poniendo en valor las conexiones entre el Cantábrico y el Mediterráneo, con doble vía, que haría de éste unos de los canales secos más importantes de Europa.3)    La integración y desarrollo de las plataformas logísticas de Zaragoza (entre las más importantes de Europa), Teruel y Valencia, que pondrá a Aragón en conexión con las grandes vías marítimas, en especial la del Pacífico, a través del puerto de Valencia, y a la Comunidad Valenciana con conexión con el valle del Ebro y el eje Atlántico.4)    El impulso de un proyecto de desarrollo combinado de las comarcas del interior de Castellón y Valencia y la provincia de Teruel.5)    El acuerdo para solucionar los problemas hídricos que padecemos ambas regiones y del que todos salgamos beneficiados, aportando sentido común, racionalidad y flexibilidad.6)    El problema común del sector automovilístico y su futuro.Afrontar y resolver estas cuestiones es fundamental no sólo para mejorar nuestras capacidades y oportunidades, sino también para lograr una mejor articulación del territorio y de la economía española.Pero sólo seremos eficaces y dueños de nuestro futuro si actuamos con sensatez, unidos por la razón y los intereses objetivos y no separados por la confrontación puntual y las emociones.