¿Para cuándo estarán conectadas Castellón, Valencia y alicante por el Corredor Mediterráneo? por Federico Félix, presidente de la Fundación Pro AVE

España y la Comunidad Valenciana tienen un serio problema: La ausencia de compromiso político con el desarrollo económico y social del país y nuestra región y falta de visión estratégica de nuestros gobernantes. Lo que, desgraciadamente, se ha venido dando, tanto a nivel nacional como autonómico, en los últimos veinte años e independientemente de los partidos que estén en el gobierno.

Lo que permite entender los escasos avances en cuestiones fundamentales para nuestro futuro y la necesidad, tantas veces reclamada, del desarrollo de una sociedad civil activa y reivindicativa, que establezca las bases de una estrategia de desarrollo.

En una situación tan dramática como la actual, no sólo por la pandemia sino por la necesidad de salir reforzados del actual estado de postración de nuestra economía y sociedad, carecer de una estrategia seria, bien comunicada y económica, social y políticamente articulada, constituye un grave riesgo al que se enfrenta un país necesitado de grandes cambios de su modelo económico, como ocurre en España.

El más claro exponente de esta lamentable situación es la desidia con la que se está gestionando el desarrollo del Corredor Mediterráneo, un instrumento fundamental para reforzar la posición competitiva de nuestra economía en el contexto internacional, impulsando la diversificación del modelo productivo, elevando la productividad, estimulando la calidad del producto y la capacidad innovadora, contribuyendo decisivamente al desarrollo sostenible.

Recientemente, el ministro valenciano de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana del gobierno de España, D. José Luis Ábalos, se felicitaba en un acto público en Extremadura de que esta sería la primera Comunidad en España que tendría, en breve, conectadas sus principales ciudades por alta velocidad, después de Cataluña.

Hay que felicitar a los extremeños por este hecho, y al presidente Guillermo Fernández Vara por su exitosa labor en conseguirlo. Pero resulta curioso que la Comunidad Valenciana aún esté lejos de tener conectadas en alta velocidad sus tres capitales de provincia, hito estratégico para vertebrar eficaz y competitivamente nuestra Comunidad, debido a unos escasos Km en el nudo de la Encina, que según parece presentan problemas logísticos de tal envergadura que el Ministerio se ha sentido incapaz de resolver, por lo menos en los últimos cinco años.

Federico Félix Real, presidente de la Fundación Pro AVE, presidente de la Federación Agroalimentaria de la Comunidad Valenciana y vicepresidente de FERRMED, en el Acto Empresarial por el Corredor Mediterráneo de 2020

Y mientras tanto, el Corredor Mediterráneo sigue durmiendo el sueño de los justos casi quince años y posponiendo fechas en la ejecución sistemática de la doble plataforma en ancho internacional para el tráfico de mercancías y pasajeros entre Tarragona y Algeciras. Lo que no sólo constituye un acto de discriminación territorial flagrante del Gobierno de España, sino un olvido de la trascendencia que, para la competitividad económica y el desarrollo sostenible del país como un todo, tiene el Corredor, al ser el Arco Mediterráneo español la principal base exportadora y turística de España.

Como la propia realidad política del país pone de relieve, y los ejemplos de ello son abundantes, nuestros gobernantes se mueven por intereses propios y los de aquellos que necesitan para sostenerse en el poder.

De ahí que resulte curioso que estando el gobierno del Pacto del Botànic compuesto por los dos partidos que constituyen el gobierno de España, PSOE y Unidas Podemos y otro, Compromís, que apoya a dicha coalición de gobierno en Madrid, que deberían entender el papel estratégico del Corredor Mediterráneo y la necesidad de su pronta ejecución, tanto para el desarrollo de España como de la Comunidad Valenciana, el Gobierno de España sea tan poco sensible a este proyecto.

Esto obliga a preguntarse por el papel que están cumpliendo los responsables públicos y partidos políticos autonómicos en este trascendental problema.

La triste realidad es que cuando gobernaba en España el Partido Popular, poco hizo el PPCV para convencer al gobierno central del papel estratégico del Corredor. Ahora que gobiernan PSOE y Unidas Podemos en Madrid, con el apoyo de Compromís, ni unos ni otros, ni en la Comunidad Valenciana, ni en Madrid se ocupan de una cuestión tan importante para el futuro de nuestra sociedad, empleando sus cartas en otros menesteres, como es el entorpecimiento del tan necesario desarrollo del puerto de Valencia que, junto con el Corredor, permitiría dar un serio impulso a la competitividad y transformación del tejido productivo nacional y al desarrollo de la Comunidad Valenciana.

Una vez más se pone de manifiesto que sólo el desarrollo de la sociedad civil y una presencia más activa de ésta para que se exigir que se cumplan los grandes retos y proyectos que como país tenemos, puede permitir construir un futuro más prometedor. Tanto España como la Comunidad Valenciana están necesitadas de esta fuerza que obligue a nuestros políticos, tanto autonómicos como nacionales, a ponerse las pilas y trabajar seriamente por un futuro mejor para todos los españoles.

Federico Félix Real

Presidente de la Fundación Pro AVE
Presidente de la Federación Agroalimentaria de la Comunidad Valenciana
Vicepresidente de FERRMED      

La Fundación Pro-AVE explica el carácter vital del Corredor Mediterráneo e inaceptables retrasos de la infraestructura en un momento decisivo para España

Desde la Fundación Pro-AVE, se ha venido explicando hasta la saciedad, el carácter vital del Corredor Mediterráneo para la economía y la sociedad española, así como la gran oportunidad que hoy se presenta no sólo para hacer de él un motor fundamental de crecimiento, creación de empleo y desarrollo sostenible, tan necesarios para superar los problemas económicos generados por la pandemia y avanzar en la lucha contra el cambio climático, sino también de contar con la financiación necesaria para llevarlo a cabo al cumplir todos los requisitos del Plan de Reconstrucción Europeo.

El Corredor Mediterráneo, motor fundamental de crecimiento, creación de empleo y desarrollo sostenible

La sociedad civil del Arco Mediterráneo lo ha reivindicado con todas sus fuerzas, y con muy buenas razones, y ha exigido a los políticos de todos los partidos que se comprometan, se coordinen y cooperen con las organizaciones sociales para que el Corredor Mediterráneo sea una realidad en funcionamiento en 2023. Porque no sólo es necesario en la actual situación creada por la pandemia, sino posible y fundamental para el desarrollo futuro del país.

Pero he aquí que el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, ha declarado en la ciudad de Almería dos hechos de trascendental importancia para el desarrollo del Corredor Mediterráneo. Por un lado, que se retrasa la llegada de la alta velocidad a esta ciudad, prevista para 2023, a 2025-2026, por otro, que no se empezarán las obras desde Almería a Granada hasta que la línea de Murcia a Almería no esté finalizada.

En una situación como la actual, cuando el país necesita un gran motor económico como lo es el Corredor Mediterráneo, con un importante efecto arrastre sobre múltiples actividades productivas y grandes generadoras de empleo, con un fuerte impacto sobre la competitividad y capacidad exportadora del país y un sensible efecto sobre el desarrollo sostenible de España y Europa, resulta sorprendente que el ministro responsable de Infraestructuras del gobierno de España y buen conocedor del papel estratégico del Corredor, anuncie estas decisiones políticas sin ruborizarse.

El retraso no tiene sentido en este momento, ni es aceptable que tenga que esperar el inicio de la construcción de la línea Almería-Granada a la finalización del trayecto Murcia-Almería. En el momento actual no hay motivos técnicos ni económicos que impidan que la alta velocidad propiamente dicha llegue a Almería en 2023, ni que se simultaneen las obras de las dos líneas. Sólo la ausencia de voluntad política puede explicarlo.

En el momento actual no hay motivos técnicos ni económicos que impidan que la alta velocidad propiamente dicha llegue a Almería en 2023, ni que se simultaneen las obras de las dos líneas. Sólo la ausencia de voluntad política puede explicarlo.

Almería y Granada y sus áreas de influencia son, en primer lugar, las grandes damnificadas de la inconsistencia, incoherencia y falta de visión de presente y futuro del gobierno de la nación. Pero igualmente lo es todo el Arco Mediterráneo Español, puesto que el proyecto del Corredor Mediterráneo no sólo tiene una misión transformadora de nuestro país, sino también integradora, tanto en lo económico como en lo social, de toda un área que comparte problemas, necesidades y oportunidades comunes.

Un retraso tan considerable en la ejecución del Corredor no sólo tendrá un gran coste para la economía nacional y el desarrollo sostenible del Arco Mediterráneo, España y Europa, sino que imposibilitará un uso eficiente de los fondos del Plan de Reconstrucción Europeo que tanto se ajustan a este proyecto.

Es el momento de que el gobierno de España demuestre su visión de futuro y compromiso con el desarrollo económico, social y ecológico del país, rectificando y ejecutando el Corredor Mediterráneo en los plazos comprometidos, esto es, que en 2023 exista ancho internacional desde Almería a la frontera francesa y que en 2025 la conexión sea completa desde Algeciras a la frontera francesa.

 

Federico Félix Real 

Presidente de la Fundación Pro AVE
Presidente de la Federación Agroalimentaria de la Comunidad Valenciana
Vicepresidente de FERRMED