Las Empresas Familiares aceleran el proceso de transformación hacia un modelo más sostenible

La red de Asociaciones de Empresa Familiar de toda España (AATT), de la que formamos parte y que integra más de 1.500 empresas familiares líderes en sus sectores de actividad, ha puesto en marcha el 2º Ciclo de encuentros online “La empresa familiar comparte”. El propósito de esta actividad es compartir entre todos los socios sus experiencias, los retos a los que se han enfrentado ante la situación actual y las medidas que han ido acometiendo para minimizar al máximo las consecuencias derivadas del mismo, además de visibilizar la importancia que tienen las empresas familiares en la generación de riqueza y empleo en España.

La sesión online titulada “Transformación y Sostenibilidad” ha contado con la participación de Pilar Martínez- Cosentino, vicepresidenta Ejecutiva Grupo Cosentino, y de Enrique Silla, CEO Jeanología, bajo la moderación del periodista Juanma Romero.

Durante el pasado año las empresas familiares aceleraron los procesos de transformación hacia un modelo más sostenible y los valores intrínsecos a este tipo de empresas, como son la vocación por el largo plazo, el esfuerzo y el compromiso con las familias, los empleados y el entorno en el que se asientan.

Para Pilar Martínez-Cosentino, que lidera desde Almería una empresa que produce y distribuye superficies innovadoras para el diseño y la arquitectura, con 5.000 empleados en todo el mundo y unas ventas al exterior que representan el 92% de su facturación total, el concepto de sostenibilidad es algo más que cuidar del medio ambiente.

 

“En Cosentino entendemos la sostenibilidad en un sentido amplio, como una manera de preservar la Compañía en el futuro haciéndola valiosa para el entorno ambiental, la sociedad y todos los grupos de interés”.

 

En esta misma línea se pronunció Enrique Silla, para quien la sostenibilidad consistiría en alinear tres aspectos: planeta, personas y beneficios. “Lograr el objetivo de la sostenibilidad solo se consigue con rentabilidad”, aseguró el CEO de Jeanología, una empresa textil valenciana presente en 22 países, cuya facturación procede en un 98% del exterior y que ha conseguido liderar la transformación de industria textil en el mundo con sus tecnologías disruptivas capaces de aumentar la productividad, reducir el consumo de agua y energía, eliminando al mismo tiempo residuos y emisiones.

Para los dos empresarios la sostenibilidad se ha convertido en un concepto clave dentro de la visión competitiva de la empresa. “Estamos en un mundo en el que el consumidor no va a comprar un producto si sabe que para fabricarlo se han destruido recursos naturales o se ha empleado mano de obra infantil”, aseguró Enrique Silla.

“Si las empresas son competitivas en sostenibilidad y responsabilidad social, se ganarán la credibilidad y confianza del cliente y conseguirán atraer y retener talento”.

 

Las Administraciones Públicas deben incentivar, no penalizar

Por su parte, Pilar Martínez-Cosentino subrayó la necesidad de que las empresas realicen el viaje hacia la sostenibilidad acompañados de las Administraciones Públicas y de la sociedad en general. “Si queremos dar un salto adelante como sociedad, sin dejarnos a nadie atrás, necesitamos incrementar la competitividad de las empresas por la vía de incorporar talento, y para ello se necesita impulsar la FP Dual y unos estudios universitarios que respondan a las necesidades de las empresas”. “O hacemos un plan de Educación a largo plazo en España o será complicado evolucionar como país”, afirmó.

Desde el punto de vista de estos dos empresarios familiares, el papel de las Administraciones Públicas a la hora de lograr el reto de una mayor competitividad empresarial pasa por crear unos marcos normativos que incentiven la inversión y la actividad y no las penalicen. “Necesitamos incentivos a la generación de empleo, a la I+D+i; a la internacionalización; hace falta que las Administraciones nos ayuden a ser más competitivos. Las empresas somos parte de la solución, y en la medida en que seamos más competitivas y rentables, podremos contribuir de mejor manera a la sostenibilidad”, afirmó Martínez-Cosentino.

En la misma línea se pronunció Enrique Silla, quien pidió a las Administraciones Públicas “menos intervencionismo y que dejen la gestión en manos de las empresas”.

Sobre las lecciones que la pandemia ha dejado a las empresas familiares, los dos empresarios coincidieron en subrayar la capacidad de resiliencia que se ha instalado en los empresarios. “Creo que estamos ahora mejor preparados para un mundo más incierto; hemos ganado en flexibilidad y agilidad para enfrentarnos a situaciones que pueden volver a ocurrir en el futuro”, aseguró el CEO de Jeanología. Pilar Martínez-Cosentino hizo hincapié, además, en un nuevo estilo de gestión que apuesta por organizaciones más horizontales y que sabe escuchar mejor al cliente: “nos hemos reinventado, y lo que viene después del Covid no se va a parecer a lo que había antes”, señaló.

A su juicio, las herramientas con las que la empresa familiar seguirá liderando la creación de empleo y la generación de bienestar en las sociedades serán esa apuesta por la sostenibilidad que conecta directamente con la idiosincrasia de estas organizaciones y que, en buena medida, es la consecuencia de unos valores muy arraigados en su seno, como la mirada puesta en el largo plazo, los valores relacionados con la familia, el trabajo y el esfuerzo, y el compromiso con empleados, proveedores, clientes y con la sociedad.

No obstante, las empresas familiares “deberán seguir dando la batalla para ganar tamaño, perdiendo el miedo al crecimiento inorgánico, mediante operaciones de fusión”, como sostuvo Enrique Silla, y redoblar su apuesta por la comunicación “para poner en valor ante la sociedad su papel fundamental en la creación de riqueza y bienestar”, en palabras de Pilar Martínez-Cosentino.

Las empresas familiares se comprometen con la reactivación económica de España en el Encuentro Online del ciclo ‘La Empresa Familiar Comparte’

Las Asociaciones Territoriales de Empresa Familiar han celebrado este viernes el último encuentro online del ciclo La empresa familiar comparte, organizado conjuntamente por las 18 asociaciones territoriales de España. En esta ocasión, la jornada giró en torno a la reactivación de la economía española de la mano de las empresas familiares, y estuvo dirigida por la Asociación Gallega de la Empresa Familiar (AGEF), la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) y la Asociación Murciana de la Empresa Familiar (Amefmur) y contó con las presentaciones del presidente de Altia, Tino Fernández; la CEO de Dormitienda, Mónica Duart; y el director general de Urdecon, Enrique Fernández-Delgado.

Las Asociaciones Territoriales de Empresa Familiar aglutinan a más de 1200 empresas de todos los sectores de actividad, que representan en conjunto un 10 % del PIB nacional. Así, el seminario tuvo el objetivo de poner en valor el papel fundamental de las empresas familiares, que constituyen cerca del 90 % de las empresas y generan 2 de cada 3 puestos de trabajo, en la reactivación de la economía española como consecuencia de la crisis producida por el covid-19.

La apertura de la sesión fue a cargo del presidente de la Asociación Gallega de la Empresa Familiar, Víctor Nogueira, y Héctor Dominguis, miembro de la Junta Directiva de la Asociación Valenciana de Empresarios. Nogueira destacó que los “equipos y las personas son una preocupación continua y constante para las empresas familiares, y especialmente en momentos de crisis como la actual”. Por su parte, Dominguis resaltó la importancia de movimientos como #EstoNOtienequePARAR, #EActivate o #damoslacara que ponen en valor a las empresas, a los empresari@s y a sus trabajadores, para que la rueda de la economía no pare. La clausura del acto fue realizada por el presidente de la Asociación Murciana de la Empresa Familiar, José María Tortosa, que declaró que “las empresas familiares, como motor de la economía regional y nacional, volverán a ser imprescindibles en la recuperación económica”, a la vez que recordó que será “fundamental la colaboración entre las distintas administraciones” para conseguir la reactivación necesaria en los próximos meses.

Los empresarios se comprometen con la reactivación y coincidieron en que es “necesaria la confianza por parte de las Administraciones en el sector privado, ya que las empresas familiares somos la columna vertebral de la economía y somos imprescindibles en la recuperación económica”. En este sentido, los participantes compartieron que “se debe apostar por una colaboración público-privada” y que “el Gobierno debe apoyar el tejido empresarial, ya que sin iniciativa privada no hay crecimiento ni empleo”. Asimismo, los empresarios han resaltado la importancia de establecer sistemas de simplificación administrativa y burocrática para facilitar la puesta en marcha de empresas, las contrataciones e inversiones.

El presidente de Altia, Tino Fernández, indicó que se debe huir de “políticas cortoplacistas”, algo en lo que coincidió la CEO de Dormitienda, Mónica Duart, que expresó que “se debe trabajar más, pensando en el medio y largo plazo para caminar de cara a la recuperación”. El director general de Urdecon, Enrique Fernández-Delgado añadió que “el cambio de modelo económico es un debate del que se viene hablando desde hace tiempo, y el covid ha hecho que los procesos se aceleren”.

Los tres ponentes valoraron que “se deberían reconocer más las iniciativas llevadas a cabo tanto por grandes como medianas y pequeñas empresas”, que “demuestran nuestro compromiso con nuestra gente y con la sociedad”. En este sentido, apuntaron que “los empresarios debemos ganar en visibilidad, mostrando la cara más humana del tejido empresarial”.

Para finalizar, los conferenciantes aportaron propuestas concretas para la reactivación de la economía. El presidente de Altia apuntó a la “alineación de la fiscalidad con el crecimiento” y a un “tratamiento fiscal favorable para el emprendimiento”, insistiendo en que lo primordial es “la confianza en el sector privado, evitando enviar mensajes contra el mismo desde la política”. Por su parte, la CEO de Dormitienda añadió que resultaría positivo “poner en marcha iniciativas que activan el empleo, facilitando la contratación y eliminando trámites burocráticos”. Además, el director general de Urdecon señaló la “necesidad de impulsar la colaboración público-privada” y la “creación de políticas de empleo más accesibles”.

Conclusiones Seminario La Empresa Familiar Reactivando la Economía Española

Las Empresas Familiares del sector logístico han conseguido evitar el segundo shock tras los efectos del virus: el miedo al desabastecimiento

Empresarios del sector logístico reunidos por las Asociaciones Territoriales de la Empresa Familiar de toda España, entre ellas AVE, para analizar sus perspectivas en el actual contexto sanitario y económico, han compartido sus experiencias, análisis sobre el impacto de la pandemia en este sector y los cambios producidos en distintos ámbitos y los retos que el sector abordará a partir de ahora.

La jornada telemática, enmarcada en el Ciclo organizado por la red de Asociaciones Territoriales Vinculadas al IEF #EmpresaFamiliarComparte, fue organizada en esta ocasión por la Asociación de la Empresa Familiar de Aragón (AEFA), la Asociación de la Empresa Familiar de Canarias (EFCA) y la Asociación Andaluza de la Empresa Familiar (AAEF).

Alfonso Sesé, presidente del Grupo Sesé, Manuel Valle, presidente del Grupo Valora y SEUR Canarias, y Borja de Torres, presidente de Acotral, participante coincidieron en formar parte de un sector de los que han tenido la oportunidad, pero sobre todo la obligación de mantener su actividad durante todos y cada uno de los días del estado de alarma.

Si en un primer momento, contener el colapso sanitario era el primero objetivo como sociedad, atajando la propagación, a continuación, evitar el colapso por el desabastecimiento de hogares y centros críticos para mantener el mínimo soporte vital constituyó el bastión de resistencia ante la embestida de la pandemia. En ese escenario, la cadena logística, visible en los transportistas, se convirtieron en “proveedores de la confianza”, tan necesaria para asegurar la tranquilidad de las personas.

Tratándose de un sector de servicios horizontal a los demás, su demanda de actividad ha estado marcada por las empresas y particulares a los que en caca caso han servido con sus actividades de distribución, almacenamiento, transporte o mecanización. Según el usuario, han visto frenada en seco su aportación (producción automóviles, por ejemplo), o redoblada su demanda (distribución alimentaria).

En el caso del sector del transporte por carretera, la atomización y especialización de las empresas (un 70% de las empresas tienen una flota formada por un solo vehículo), y de todos, estiman que sólo un 15% ha sido capaz de mantener su actividad regularmente. Y, sin embargo, ha habido puntas del 200% del trabajo habitual, hasta una media del 120/160%, en casos y momentos muy particulares, comentaba Borja de Torres.

El enorme repunte de las compras on-line o comercio electrónico, sobreponderando el B2C frente al B2B, ha sido otro cambio sustancial que ha obligado a reforzar las tareas del sector logístico, quizás con cambios en los patrones de consumo que podrían consolidarse, apreciación que describió Manuel Valle, y que ha demostrado la adecuada capacidad y preparación del sector logístico para hacerle frente, en palabras de Alfonso Sesé.

Algunas de las preocupaciones básicas en el desarrollo del trabajo de estas empresas se centraron en la escasez de medios de protección personal las primeras semanas. Cantidades muy importantes eran difíciles de conseguir, y el sacrificio de horas en el  servicio, las medidas de seguridad ya habituales en un subsector muy regulado (transporte). Aún así encontraron soluciones para mantener su actividad y asegurar así la de productores y consumidores finales, e intermedios.

En este caso, al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, se le reconoce la adecuada respuesta a determinadas necesidades planteadas de inmediato por el sector, flexibilizando y facilitando las demandas de los operadores para mantener su trabajo. A pesar de ello, creen que podría aprovecharse para eliminar ciertas cargas burocráticas y lastres administrativos pendientes.

Las demandas hacia la Administración se centran en la provisión de liquidez vía financiación, y cualquier ayuda que permita la reactivación de las demás empresas de otros sectores para que estas a su vez mantengan la necesidad de servicios logísticos en los niveles anteriores.
Los tres empresarios han reconocido como retos inmediatos del sector – aprovechando las capacidades de innovación, coraje y creatividad impuestas por la necesidad y fruto del tremendo esfuerzo durante estos meses -, la necesidad de mejora de la competitividad de las empresas, bien por tamaño, bien por la mejora de procesos, o como apuntaban Alfonso Sesé y Borja de Torres, mediante la intensa digitalización de sus operaciones.

Además de los empresarios familiares del sector logístico, actuaron como anfitriones Alicia Martinón, presidenta de la Asociación de Empresa Familiar de Canarias y José Luis Martínez Lázaro, presidente de Asociación Andaluza de Empresa Familiar. Todos ellos aprovecharon sus alocuciones en la jornada para subrayar el espíritu de cohesión de las asociaciones de la empresa familiar y para resaltar el papel de las empresas familiares en la superación de la crisis.

LAS EMPRESAS FAMILIARES DEL SECTOR TURÍSTICO RECLAMAN CERTIDUMBRE SOBRE LAS FECHAS DE APERTURA DE FRONTERAS Y MEDIDAS URGENTES DE APOYO ANTE LA AMENAZA DE OTROS COMPETIDORES

Empresarios del sector del turismo y la hostelería reunidos por las Asociaciones Territoriales de la Empresa Familiar para analizar sus perspectivas en el actual contexto sanitario y económico, han solicitado al Gobierno certidumbre en relación con los planes de apertura de fronteras y apoyo a las empresas para paliar las consecuencias de la crisis y que puedan activar cuanto antes las contrataciones. En concreto, solicitan un calendario con fechas claras para poder realizar sus planificaciones y decisión para implementarlo con velocidad o, al menos, de forma acompasada con el resto de países europeos.

Los empresarios mostraron su preocupación por el hecho de que otros países competidores están reaccionando más deprisa que España a la hora poner en marcha medidas de activación de su sector turístico, lo que puede representar una amenaza para nuestra industria turística, habida cuenta de que los casi 84 millones de turistas que visitan anualmente España pueden constituir un atractivo “caladero de negocio” para otros países.

La jornada telemática, enmarcada en el ciclo organizado por la red de Asociaciones Territoriales Vinculadas y organizada en esta ocasión por la Asociación de la Empresa Familiar de Madrid (ADEFAM), la Asociación de la Empresa Familiar de Alicante (AEFA) y la Asociación Balear de la Empresa Familiar (ABEF), contó con la participación de Ángeles Serna Lorente, presidenta del Consejo de Administración de TM Grupo Inmobiliario; Carmen Matutes Prats, subdirectora de Palladium Hotel Group, y Javier Pérez Jiménez, director Gerente de VP Hoteles.

Los empresarios, además, coincidieron en reivindicar el alto nivel añadido del sector turístico español, tanto en términos de calidad, procesos e innovación, lo que le ha llevado a ser un referente mundial dentro de este campo, y establecieron en el horizonte de 2023 la completa normalización del sector, lo que pasará por contar con un tratamiento eficaz para la curación del virus.

Sobre el impacto económico que tendrá la crisis para el sector hotelero en 2020, Javier Pérez, director gerente de VP Hoteles, aseguró que dependerá en buena medida de que se pueda activar el sector de eventos a partir del mes de septiembre. “Si se pone en marcha esta actividad, podremos cubrir en estas fechas el 80% de nuestra ocupación anual”, dijo refiriéndose a sus hoteles radicados en Madrid. Por su parte, Carmen Matutes, subdirectora de Palladium Hotel Group, señaló que abrir antes del 1 de julio supondría minimizar las pérdidas. “De no ser así, a muchos establecimientos nos le merecerá la pena abrir”, dijo.

Los ponentes también resaltaron el importante esfuerzo que están afrontando para adaptarse a la nueva situación y estar preparados para la reactivación del sector. En relación con este punto, Javier Pérez explicó que en sus hoteles han apostado por la realización de test de detección del COVID-19 a todos sus clientes y la puesta en marcha de medidas contenidas en los nuevos protocolos de seguridad que, en algunos hoteles, suponen un sobrecoste de 47 euros por noche. Además, dijo, están estudiando la posibilidad de integración con otros hoteles para mejorar sinergias de todo tipo.

Carmen Matutes explicó que en su cadena hotelera están trabajando en una triple dirección: el establecimiento de protocolos de seguridad y protección, la inversión en nuevas tecnologías que permitan mantener las distancias entre clientes y personal, y la comunicación para hacer saber a los clientes que sus establecimientos son seguros.

Sobre este último aspecto también se pronunció Ángeles Serna, presidenta de TM Grupo Inmobiliario. A su juicio, será necesario “reenfocar las campañas para adaptarnos a los cambios que se pueden producir en el perfil del consumidor”. “El mundo del viaje va a cambiar y tenemos que adaptarnos”, aseguró.

Además de los empresarios familiares del sector turístico, intervinieron en el webinario Maite Antón, presidenta de la Asociación de Empresa Familiar de Alicante; Esther Vidal, presidenta de Asociación Balear de Empresa Familiar, y Alberto Zoilo Álvarez, presidente de la Asociación de Empresa Familiar de Madrid. Todos ellos aprovecharon sus alocuciones en la jornada para subrayar el espíritu de cohesión de las asociaciones de la empresa familiar para resaltar el papel de las empresas familiares en la superación de la crisis y coincidieron también en criticar la anunciada e hipotética derogación de la reforma laboral.

Las Empresas Familiares del sector agroalimentario piden que se ponga en valor el sector y se incentive el consumo

Dentro del Ciclo #EmpresaFamiliarComparte, las asociaciones de empresas familiares de Extremadura, Castilla la Mancha y La Rioja han celebrado esta mañana el tercer Encuentro Online “Sector Agroalimentario: innovación, calidad y compromiso en la crisis del COVID-19”, en el que se ha analizado el presente y el futuro del sector así como los retos a los que se enfrenta ante la actual situación.

En esta ocasión, el encuentro online, ha contado con la presencia de Clemente Loriente Calonge, Consejero Delegado de Incarlopsa, Empresa Asociada a la Asociación de la Empresa Familiar de CLM, José María Naranjo Mejías, Responsable de Mercado Internacional y Director de Marketing de Tany Nature, Empresa Asociada a la Asociación Extremeña de Empresa Familiar,  y Fernando Baroja Mazo, Director General de Grupo Cidacos, Empresa Asociada a la Asociación Riojana de Empresa Familiar.

Los tres empresarios participantes en la mesa redonda han coincido en resaltar que hay que poner en valor el sector “como pilar básico”, claramente demostrado durante esta pandemia, así como en la necesidad de “establecer alianzas entre grupos de empresas para exportar e invertir en I+D”.

Han destacado el papel fundamental de los trabajadores y empresas colaboradoras, “que se han volcado en esta situación”. Asimismo, los participantes en el encuentro han subrayado la importancia de “velar por la protección y la seguridad de clientes y trabajadores en todo el proceso productivo”, así como por la necesaria interrelación con colaboradores y trabajadores para establecer una hoja de ruta clara.

Todos han coincidido en que el futuro se presenta incierto pero hay que afrontarlo con optimismo porque “acabamos saliendo de todas las crisis”, si bien, para ello es necesario la puesta en marcha de incentivos que fomenten el consumo, y explorar nuevos mercados, una vez que se produzca la apertura de las fronteras, ya que el consumo nacional se verá negativamente afectado.

Destacan que esta pandemia obligará a las empresas a reinventarse para ofrecer un producto de calidad, seguro y a menor coste, optimizando el canal de distribución.

Por último han defendido y puesto en valor la figura del empresario, denostada en estos tiempos, y que es fundamental para salir de la crisis, destacando la importancia que tiene para el futuro de las empresas elegir a los mejores “compañeros de viaje” (proveedores, clientes, colaboradores, etc.).

CICLO «LA EMPRESA FAMILIAR COMPARTE»

Este encuentro online forma parte del ciclo “La empresa familiar comparte”, organizado conjuntamente por 18 asociaciones territoriales de empresa familiar de todo el país, que aglutinan a más de 1.200 empresas de todos los sectores y representan el 10 % del PIB nacional. El objetivo de este tipo de seminarios no es otro que ayudar a las empresas familiares a afrontar la actual crisis sanitaria, económica y social. Para ello, se invita a destacados empresarios y expertos con los que se profundiza en cuestiones de gran interés para retomar cuanto antes la actividad empresarial.

#EstoNOtienequeparar porque #EstoPasará

Los empresarios familiares piden a la Administración que los considere como “aliados necesarios”

El Encuentro Online donde se compartieron estas manifestaciones forma parte del ciclo “La empresa familiar comparte” que organizan conjuntamente 18 asociaciones territoriales de empresa familiar de todo el país. Todas ellas aglutinan a más de 1.200 empresas de todos los sectores que, en su conjunto, representan el 10 % del PIB nacional. Por tanto, con este tipo de iniciativas se quiere ayudar a las empresas familiares a afrontar la crisis. Para ello, se invita a destacados empresarios y expertos con los que se profundiza en cuestiones de gran interés para retomar cuanto antes la actividad empresarial.

En esta ocasión, las asociaciones de empresas familiares de Navarra (ADEFAN), Euskadi (AEFAME) y Cataluña (ASCEF) celebraron el seminario “Covid 19: Impacto, Consecuencias y Futuro en el Sector Industrial”. Una cita donde los empresarios familiares pidieron a la Administración que los considere como “aliados necesarios”. Además, se aseguró que, una vez superada la actual crisis sanitaria, “habrá muchas oportunidades para la industria española” siempre y cuando ésta se prepare para un escenario donde se pondrá más en valor la fiabilidad y la calidad que el precio.

Tras el Covid-19, “habrá muchas oportunidades para la industria española” siempre y cuando ésta se prepare para un escenario donde se pondrá más en valor la fiabilidad y la calidad que el precio

Actuaron como ponentes Javier Ormazabal, presidente de Velatia; Javier Riera-Marsá, CEO de Radar Process (Grupo Coemba) y el presidente y consejero delegado de Lizarte, Óscar Huarte. A todos ellos se les pidió su punto de vista sobre cuáles pueden ser las palancas que permitan una vuelta a la actividad lo antes posible; cómo afectará el coronavirus a las cadenas de suministro mundiales y qué políticas activas debiera llevar a cabo la Administración española para ayudar a las empresas en su proceso de reactivación.

En torno al primer tema, Ormazabal, Riera-Marsá y Huarte coincidieron en que la previsión a la hora de asegurar la liquidez de la empresa, la apuesta por la internacionalización y la aplicación flexible de ERTE son claves para garantizar la continuidad de la idea de negocio. “Tenemos que aprender a movernos de otra manera y conceder un nivel de autonomía altísimo a nuestra gente”, apuntó a este respecto el presidente de Velatia. Igualmente, a lo largo del debate surgió, también la cuestión de las inversiones. Algo para lo que el CEO de Radar Process consideró imprescindible el plazo y la confianza que solo será posible, en su opinión, cuando haya una vacuna.

CHINA Y LA ADMINISTRACIÓN ESPAÑOLA

Sobre la situación en la que pueden quedar las cadenas de suministro mundiales, los participantes se mostraron optimistas en torno al papel que puede desempeñar la industria española. “De esta crisis saldrán muchas oportunidades y hay que estar preparados”, dijo Javier Riera-Marsá. Un argumento compartido por Javier Ormazabal para quien se va a acelerar el proceso que ya existía en torno a si resultaba idóneo la concentración de proveedores. “Ahí España tiene la ocasión de posicionar su industria en algunos campos en los que hemos venido trabajando desde hace años ya que se va a poner en valor más la fiabilidad y la calidad que el coste”, comentó.

Por último, cuestionados sobre las políticas activas que debiera llevar a cabo la Administración española para ayudar a las empresas en su proceso de reactivación, Óscar Huarte demandó ayudas a la inversión, a las nuevas alianzas empresariales que puedan surgir o al mantenimiento o al aumento del empleo. En ese sentido, “la Administración debiera considerarnos como unos aliados necesarios que tienen el propósito de generar valor”, sentenció en referencia a la visión a largo plazo, el compromiso con los trabajadores o la solvencia que siempre ha demostrado y caracterizado a la empresa familiar.